...y un hombre de treinta y siete años.

Entiendo la ilusión de Conrado y Aurora para que todos sean testigos de su felicidad, pero admito que me sorprende que algo tan personal como una petición de matrimonio se convierta en un espectáculo público, aunque la excusa sea una celebración múltiple. Es cierto que ya con la petición de María se hizo también una fiesta, pero se limitaba a un intercambio de regalos y a un anuncio público del compromiso, como he leído que era habitual en estos temas. Y reconozco que también me sorprende que Conrado se haya prestado a ello, aunque es evidente que el amor ablanda al más pintado.

Alguien decía el otro día que estos personajes eran complejos. Aun admitiendo que sea así, no creo que lo sean más que cualquiera de los demás de la serie. Pero lo que sí tengo que decir es que el de Conrado había conseguido crearme muchas expectativas y no me gusta lo que los guionistas están haciendo con él, ni lo que le hacen decir. Un ejemplo, sus palabras a Aurora en el Jaral. No me considero una mojigata y entiendo que era un momento íntimo, pero reconozco que me han chirriado, incluso por un momento he creído que no había captado bien el sentido de sus palabras cuando se ha mostrado algo más que picante. Yo no lo veo de esta manera, sino más bien un hombre templado y consecuente con su edad y sus actos, aunque como dije (y no varío ni una coma) también creo que se está precipitando en querer cerrar su compromiso con Aurora sin que se conozcan lo suficiente. Por mucho que en 1921 no fuera un caso excepcional.

Ya he dicho en otras ocasiones que me gusta que las mujeres de PV sean fuertes, sepan defender sus derechos y su independencia, y sean compañeras, amigas, pero no esclavas de sus hombres. Y me gusta que éstos lo entiendan y lo respeten, pero también que no se dejen marcar el rumbo. Fue motivo de reproche en Tristán y en Martín, y ahora lo puede ser en Conrado, al que están convirtiendo en un simple partenaire, dependiente de las decisiones de Aurora. Algo que, por cierto, no es únicamente mi opinión, sinó que él mismo lo ha admitido.

Conrado es un hombre con una gran personalidad, sensato, que tiene las ideas claras, además de emprendedor e inteligente. Pero creo que los guiones últimamente no ayudan mucho a dejar ver esta parte tan interesante de él, y además con la llegada ya conocida de un antiguo amor, pienso que su papel aún irá a peor. Pero no voy a hablar aún de ello porque hay que ver por donde irán los tiros, aunque de lo que no tengo dudas es que esta situación no le va a beneficiar en nada, excepto quizás en más protagonismo.