31 de agosto de 2014

El silencio de los que saben

“La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio”.
El otro día escribía sobre la inutilidad de que Mauricio llegara a conocer el fondo de algunos asuntos turbios. Pero hay otro personaje con parecidas características, aunque sus motivaciones para callar sean bien distintas: D. Anselmo. Uno por fidelidad y el otro por obligación mantienen la boca cerrada sobre temas que no tendrían que llegar tan al límite como acaba sucediendo.
Por descontado entiendo el compromiso de este último de callar, por el tema de los votos de su ministerio, aunque lo que no acabo de comprender es que después se quede de brazos cruzados, llevando su pesar en silencio y sin intentar nada. Estoy segura que tiene medios para que, sin decir abiertamente lo que sabe, ayudar a resolver situaciones desesperadas. Y su mutismo puede acabar haciéndolo cómplice incluso de muertes, que de otro modo podrían haber sido evitadas. Porque no veo que sea muy complicado llevar las conversaciones a un terreno que permita al interlocutor llegar a conclusiones por sus propios medios, sin que el sacerdote tenga que romper su promesa de silencio.
Naturalmente estoy pensando ahora mismo en Mariana. También es cierto que el sacerdote desconoce la totalidad del asunto y el hecho de que Micaela esté implicada en el tema, pero es que tampoco considero que el hombre haya puesto mucha convicción en intentar ayudar a la chica. La confesión es un tema entre ellos dos y no veo porque no pueden hablarlo.
O quizás estoy precipitándome metiendo baza en algo de lo que desconozco todas las implicaciones, y en realidad fuera del confesionario sea un tema vetado. Pero tengo presente haber visto escenas de la doña y D. Anselmo conversando de muertes y maldades cometidas por ella, y recordándole ésta que no podía difundirlo por estar bajo secreto de confesión. Así que hablarlo si pueden, mientras no haya más testigos.
Y así Mariana va deslizándose lentamente hacia el abismo. Otra cosa es la actitud de ésta, que ya comenté en otro post que me parece absurda, por no decir otra cosa peor. En realidad toda la trama creo que lo es, y no quiero volver a ahondar demasiado en el tema porque ya lo he hecho anteriormente. Que venga alguien que le diga que se va a vengar de ella y lo único que se le ocurra es sentarse a esperar que suceda, sin hacer nada para evitarlo, me parece un sinsentido total. De hecho ya lo es que se anuncie tal cosa y que además se pida algo parecido a colaboración del mismo sujeto objeto de la venganza. 

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