Reconozco que me he pasado más rato intentando encontrar detrás de cada
palabra, cada gesto, cada afirmación o negación, una respuesta a la pregunta ¿es un adiós definitivo o un hasta pronto?, que el que he empleado viendo
realmente las escenas.
Pero me he quedado sin respuesta.
Ya es una realidad. Martín se ha marchado sin fecha de retorno (si es que
ello va a suceder algún día), y con él una parte de la esencia de la serie. Dejando
además un montón de temas inconclusos y muchas preguntas en el aire, incluido
el tema de Pilar. No se ha reencontrado con su abuelo, desconoce que Bosco es
su hermano, Aurora está siendo drogada con el fin evidente de librarse de
ella,…. Deja una hacienda en manos de no se sabe quién, una Casa de Aguas en la
que ha empeñado esfuerzos y con una propuesta económica sobre la mesa,….
Pero especialmente deja atrás una esposa y una hija, dos trozos de su
corazón que se quedan en PV.
"¡Prométeme que volverás!"
"¡Por supuesto que volveré!"
"Cuando anochezca contemplaré las
estrellas.
Tu haz lo mismo allá donde estés y tus
ojos se encontraran con los míos en el firmamento.
Y
nuestras almas se juntarán por un instante".
Ha sido una larga despedida, con momentos tiernos y palabras
preciosas, pero con el regusto amargo de la duda que aletea por encima.
Poniendo la esperanza en las palabras, aunque flotando en el aire
algo muy diferente.
Pero creo que Mar lo decía en un comentario. De alguna manera la despedida
ya empezó el día en que Martín y María se casaron, cuando su larga lucha por estar
juntos llegó a su fin. Sin embargo creo que esto no tendría que ser el final, sinó el
comienzo de algo más. Después de dos largos años, esta historia no puede
terminar con algo incierto, ni de la manera abrupta como la que nos tienen habituad@s.
Y, por supuesto, no pueden dejar con la duda indefinidamente como han hecho con
otros temas.
Hola Anna!! Con el corazón triste después de la marcha del que me mantenía todas las tardes frente al televisor, vuelvo a encontrar en tus palabras muchos de mis pensamientos... Sabíamos que este día tenía que llegar pero igualmente no se puede evitar, al menos en mi caso, sentir un gran vacío al ver que en los avances Jordi ya no está y que la serie seguirá sin el personaje que me mantenía enganchada junto a María. Como bien dices tú, lo único que nos queda como consuelo es que al menos no lo han matado, pero eso de dejarnos con la incertidumbre de sí volverá o no y después de lo que he leído x face, tengo pocas esperanzas. Eso unido a la carta, a ese miedo a que pase algo en el viaje, esa visita de la Montenegro... Ufff, no sé!!! La verdad es que una pareja como la de María y Martín, después de lo que han sufrido y tengan que tener ese final... Martín perdido para siempre en las aguas de Cuba. No lo veo justo!!! Espero que esté equivocada y sí vuelva a la serie porque a mí me va a costar un mundo verla sin que él esté... Lo dejo aquí Anna porque ahora mismo siento una gran tristeza y un gran pesimismo porque todo me parece indicar que la despedida de hoy de Jordi en PV es para siempre... Ojalá me equivoque y por favor, perdóname mi pesimismo!! Besos!!
ResponderEliminarPor favor, no pidas disculpa. Es algo que yo también siento, después de tanto tiempo compartiendo la tardes con Martín y Maria. Y, por descontado, también pienso que de ser este el final de la historia lo han hecho muy mal. Como también el de dejar a la gente con la incertidumbre, cuando ya sabemos como las gastan y que tener esperanzas es algo vano. Porque yo también me temo que lo de Jordi va a ser definitivo, a pesar de que me cuesta un mundo aceptarlo.
EliminarGracias por tu comentario
Una vez más estoy de acuerdo contigo. La despedida de Martin y María comenzó el día de su boda. He visto repetido ese capítulo miles de veces y siempre me queda la sensación de que el resto de actores no sólo mostraban la emoción propia de la escena que representaban, sino que además, estaban despidiendo a una magnifica pareja que ha consolidado sin duda a lo largo de dos años y pico el éxito de la serie. Ni las parejas Aurora/Conrado ni mucho menos Inés/Bosco lo habrían conseguido; ni por las tramas ni por el modo en que interactúan. Jordi y Loreto han sabido transmitir desde el primer momento y hasta el capítulo de hoy, emociones y sentimientos que han traspasado la pantalla haciendo creíble su historia. Reconozco que estos últimos meses sólo tenía interés por ver las escenas en las que ellos aparecían.
ResponderEliminarLa salida de Jordi sin duda deja un hueco importante y las tramas que han ideado los guionistas para seguir manteniendo la atención de los espectadores carecen de solidez. Es dar vueltas y más vueltas a una historia que se me antoja agotada. Yo la he seguido durante estos dos años y la verdad, ya he perdido el interés; no quiero imaginar lo que supondrá para los que lleven cuatro…
Te seguiré leyendo Anna.
Un abrazo
Una vez más estoy de acuerdo contigo. La despedida de Martin y María comenzó el día de su boda. He visto repetido ese capítulo miles de veces y siempre me queda la sensación de que el resto de actores no sólo mostraban la emoción propia de la escena que representaban, sino que además, estaban despidiendo a una magnifica pareja que ha consolidado sin duda a lo largo de dos años y pico el éxito de la serie. Ni las parejas Aurora/Conrado ni mucho menos Inés/Bosco lo habrían conseguido; ni por las tramas ni por el modo en que interactúan. Jordi y Loreto han sabido transmitir desde el primer momento y hasta el capítulo de hoy, emociones y sentimientos que han traspasado la pantalla haciendo creíble su historia. Reconozco que estos últimos meses sólo tenía interés por ver las escenas en las que ellos aparecían.
ResponderEliminarLa salida de Jordi sin duda deja un hueco importante y las tramas que han ideado los guionistas para seguir manteniendo la atención de los espectadores carecen de solidez. Es dar vueltas y más vueltas a una historia que se me antoja agotada. Yo la he seguido durante estos dos años y la verdad, ya he perdido el interés; no quiero imaginar lo que supondrá para los que lleven cuatro…
Te seguiré leyendo Anna.
Un abrazo