Ya empecé otro comentario de manera
parecida. Pero lo que he sentido al ver las escenas de Inés y Francisca me
incita a volver sobre lo mismo.
Ante todo me ratifico en que esta
situación no ha conseguido que sienta ninguna lástima por la primera, sinó más
bien me produce indignación por la actitud de la segunda.
Pero, aunque sólo es mi opinión y
que puedo estar equivocada, por lo que estoy dispuesta a rectificar si en el
futuro se demuestra lo contrario, sigo pensando que parte de culpa de que no
consiga empatizar con el personaje de Inés y por ello lamentar su situación actual
(algo que sólo se puede atribuir a ella misma), la tiene la propia actriz,
que no logra convencerme con su actuación. Incluso pienso que haciéndola
interactuar con María Bouzas, esta impresión aún aumenta de grados en sentido negativo, ya que aunque ésta tenga fama de generosa con los actores que empiezan y la secundan, en muchos casos no puede evitar sobresalir y ensombrecerlos, como sucede en este caso en el que considero que además su oponente se lo pone fácil. Algo que también pasa con Fe/Marta,
dado el sorprendente (por desconocido) y enorme talento que despliega ésta en su
papel y que, en mi opinión, hace que Fariba quede completamente en segundo plano. Aunque no sería muy justa si no atribuyera también una parte
importante a unos guiones que se pierden en momentos que quizás a alguien le
pueden parecer románticos pero que a mí me parecen algo sustancialmente diferente,
y también a unos personajes carentes de una personalidad (en este caso incluyo también
a Bosco) que considero que los responsables del tema no han sabido desarrollar.
Por cierto, aunque no me gusta nada el papel de bobo que le hacen interpretar, la
otra parte del binomio, el actor Francisco Ortiz, si pienso que hace bien su
trabajo. Otra cosa es que sea creíble en el papel de un chico de diecisiete
años, algo que cuesta mucho de asimilar.
Pero centrándome en el devenir de
la serie.
¿Es necesario tanto enconamiento
por parte de la doña? ¡¡Vaya víbora está hecha, que además encuentra placer en
el sufrimiento ajeno!! Cierto que tampoco es ninguna novedad en un mujer que
fue capaz de mirar hacia otro lado con su propia hija, que no tuvo reparos en
provocar la infelicidad a su hijo sólo por el hecho de que no cumplía con sus
expectativas, que conspiró para provocar un aborto a su nuera Pepa y al final
consiguió acabar con ella, que causó la muerte a su segundo esposo, que
desprecia a los de su sangre sólo por ser hijos de quién son,…. y así hasta el
infinito. Con semejantes antecedentes tampoco se puede esperar otra cosa de
ella más que maldades. Y, por descontado, sin ninguna posibilidad de que algún día
llegue su redención.
Aunque quizás también haya quien
piense que con esta actitud hacia Inés puede existir alguna justificación. De
haberla, que tampoco exime a la doña de censura, seria porque ella piensa que
la chica es una arribista, que pretende embaucar a Bosco para darse la gran
vida a su costa. Hasta ahora, nada de lo que ha visto la doña le puede dar otra impresión que esta. Pero llegados a este punto, lo lógico hubiera sido que echara
a Inés a la calle, y luego la hiciera escoltar hasta la salida del pueblo. Y no por lo que ha optado de obligarla a seguir sirviéndola, para así humillarla y
torturarla con la visión de a quien ésta no puede alcanzar. Algo que solo una
mente muy retorcida es capaz de maquinar.
Inés habrá de saber de la peor
manera posible las consecuencias de jugar con fuego, desoyendo las advertencias
de todos los que conocen bien a la doña. Ésta es el poder que aplasta a quién
osa interferirse en sus planes, es la mano implacable que venga afrentas muchas
veces inexistentes, juega con los sentimientos de los demás sin importarle el
precio, es juez, jurado y verdugo…..Y es también una víbora que engaña, manipula,
somete y finalmente clava su aguijón. Pero el veneno que Francisca lentamente va
acumulando, puede que algún día se vuelva contra ella, como el escorpión que acaba autoinmolandose al verse perdido.
Y creo que ya sería hora que esta
rueda se pusiera en marcha, ya que cansa tanta maldad gratuita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario